La espectacular historia de Javi Romo. Del equipo de Triatlón Universitat d’Alacant Triatló al Astana – Premier Tech.
Un triatleta brillante, 9º en el Cto. del Mundo Junior, 4º en el Cto. de España Absoluto, ganador del Triatlón Internacional de Fte. Álamo, entre otros muchos resultados importantes, el pasado verano debutó en ciclismo a lo grande y se proclamó Campeón de España sub23, sorprendiendo tras una escapada de casi 40 km en solitario. En 2021 debutará en el World Tour con el Astana junto a Jakob Fuglsang, Omar Fraile, Luis León o Aleksandr Vlasov, equipo con el que se ha comprometido hasta 2023.
Desde Mobel Sport le deseamos toda la suerte del mundo, fortaleza y calidad ya tiene de sobra.
El equipo Astana ha anunciado sus 6 nuevos fichajes para 2021, Javier Romo, nuestro triatleta, ha sido uno de ellos y ha firmado por tres años. Además el equipo ha fichado a los italianos Samuel Battistella, Matteo Sobrero, Andrea Piccolo, al sudafricano Stefan De Bod y al canadiense Ben Perry, con lo que no será el único nuevo del equipo.
Javi, nacido en Villafranca de los Caballeros (Toledo), es consciente a lo que ha venido al equipo, trabajar duro para el equipo y aprender. Sabe que lo primero es desenvolverse en el World Tour, algo distinto a las pocas carreras de Elite-Sub23 que ha corrido hasta la fecha. De momento ya se está adapetando al idioma del equipo, el ingles y ayer mostró su alegría con este mensaje:
“I am super happy to now be part of the team. I am very grateful to get this opportunity. The team gives me the chance and I want to work hard to give back the trust the team gives me. I hope I can step up into the WorldTour, helping the team to achieve victories. I am really looking forward to being part of it.”
Por otro lado tampoco será el único integrante del equipo español, se une a los hermanos Izagirre, a Alex Aranburu, Omar Fraile, Luis León Sánchez y Óscar Rodríguez.
El ascenso del ciclista del Baqué Team en los últimos meses ha resultado meteórico. Debutó en una competición ciclista a finales de julio y en su segunda carrera ciclista ganó el Campeonato de España sub’23 poco después.
Romo destacó como triatleta, fue 9º en el Mundial Júnior y 4º en el Campeonato de España Absoluto en 2018. Estos resultados le permiten pensar al nuevo corredor del Astana que el salto “no ha sido casualidad, sino fruto del trabajo”, y de su calidad.
Su exhibición en el Campeonato de España sub-23 reflejó sus excelentes cualidades, que terminó de certificar en el final de la temporada con el cuarto puesto en la Volta a Valencia y tercero en la Vuelta a Cantabria. Ahora se encuentra listo para el reto de la máxima categoría profesional.
“Estoy muy contento y ahora lo estoy asimilando un poco más. El salto sí que es grande. Es verdad que hace unos meses no lo hubiera imaginado, pero ha surgido así”, señala Romo.
La oportunidad de fichar por un equipo World Tour “fue algo progresivo”, con muchas propuestas del entorno profesional.
“Hicimos un test antes de empezar a correr y entonces no pensaba en llegar tan alto. En alguna salida coincidí con profesionales y me animaron a competir. Empecé a entrenar solo bici hace unos meses y el Café Baqué me dio la oportunidad. Entonces, gané el Campeonato de España”.
Todo ocurrió en muy poco tiempo, pero la casualidad no ha sido el factor determinante, sino el trabajo que ya venía desarrollando como triatleta.
“No ha sido solo suerte. Yo vengo de otro deporte en el que he trabajado mucho. Por eso digo que no es tan fácil y que no es una casualidad. He dado con buena gente que me ha ayudado, pero si no tienes nivel no te llaman, no puedes llegar hasta ahí”.
El salto del triatlón al ciclismo se apresuró debido a la pandemia.
“No había competiciones de triatlón y no tenía nada que perder, así que decidí centrarme cien por cien en la bici estos meses y por suerte salió todo bien. Quizá sin pandemia no me hubiese atrevido a dar el paso”.
De no haber competido nunca a campeón de España sub-23, resultado que tampoco sorprendió a Romo. En el triatlón su punto más fuerte era la bicicleta, pero no sabía hasta qué punto podía llegar.
“Me veía con nivel y si no hubiera sido en el Nacional, habría sido en otra carrera. Pienso que si trabajas bien y tienes el nivel, al final sale. La suerte se busca. Soy de los que piensa que las cosas las haces o no las haces, no vale hacerlas a medias”.
Ahora deberá adaptarse al ciclismo profesional del máximo nivel, proceso que llevará tiempo, aunque el toledano quiere demostrar su valía desde el primer año.
“El equipo sabe que vengo de otro deporte, que quizá me falta un poco de adaptación, y me han dado la oportunidad de estar más tranquilo. La presión se la pone uno mismo y yo quiero hacerlo bastante bien desde el primer año. Yo quiero trabajar y hacer lo mejor posible lo que me pida el equipo”
Romo llega a un equipo plagado de españoles, en quienes espera encontrar apoyo y un buen soporte de aprendizaje.
Aunque es de un pueblo pequeño de Toledo, reside en Albacete con su hermano desde hace un año y medio.
“Para entrenar estoy mejor aquí, más centrado. Casi todo es llano y con mucho aire. Es lo que hay. Si quiero hacer un poco de nivel, tengo la Sierra del Segura y Alcaraz, en la zona de Riópar, es la zona que más gusta para entrenar”.